La disciplina encargada de poner en práctica un conjunto de enfoques, procesos y estrategias que se concentran en potenciar la comercialización de un bien o servicio se le conoce como mercadotecnia o marketing. Así, posicionar una marca para que tenga el máximo impacto es el objetivo primordial de esta disciplina.
Para ello, esta disciplina debe examinar las competencias que rodean a la marca, así como el conjunto del mercado. Para esforzarse por satisfacer al público, debe averiguar cuáles son sus necesidades y deseos.
Tras un análisis exhaustivo del mercado, el marketing desarrolla estratégicamente una serie de iniciativas que apoyan la expansión y el éxito de una organización. Si queremos que una institución florezca hasta alcanzar cotas extraordinarias, esta disciplina es un aspecto clave y crucial.
Si entendemos los objetivos y las actividades del marketing, podemos concluir que debe constar de numerosas ramas muy diferenciadas:
- Contabilidad.
- Administración de empresas.
- Piscología.
- Sociología.
- Publicidad.
- Diseño gráfico.
- Comunicación.
- Nuevas tecnologías.
Los conocimientos de administración, contabilidad y estadística son esenciales para que el profesional del marketing pueda evaluar el mercado, las competencias y las demandas del público en general. También es necesario para gestionar los ingresos y los costes derivados de la adquisición y venta de bienes. La aplicación de cualquier estrategia conlleva unos costes que el experto debe conocer.
Es crucial que la disciplina dote a los profesionales de conocimientos de psicología y sociología para que puedan comprender las demandas de la gente de hoy y de la sociedad en general.
Sin embargo, el marketing tiene la opción de emplear varios tipos de tácticas. Estas pueden tener que ver con la comunicación, el diseño gráfico, la publicidad o la tecnología digital emergente. A la hora de aplicar técnicas de planificación, el marketing suele utilizar recursos y materiales de estos departamentos.